Cornejo, Petri y empresarios compartieron el Desayuno Real con las reinas de la Vendimia

El tradicional Desayuno Real en el Espacio Arizu de Godoy Cruz volvió a ser el epicentro de un encuentro que mezcla política, tradición y cultura vendimial. La décima edición de este evento, realizado el pasado viernes 7 de marzo, reunió a figuras clave del ámbito gubernamental, empresarios y las reinas departamentales de la Vendimia en una jornada que dejó varias perlitas y momentos memorables.

Desde temprano, las 18 reinas departamentales llegaron al Espacio Arizu, recibidas con un despliegue digno de la ocasión. Con vestidos elegantes y sonrisas impecables, fueron las grandes protagonistas de la mañana. Pero en este evento, la tradición marca que ellas no son quienes sirven, sino quienes son servidas.

Siguiendo el ritual que ya se volvió un clásico, los intendentes de cada departamento asumieron el rol de mozos y fueron los encargados de llevar el desayuno a sus respectivas reinas. Algunos lo hicieron con destreza, otros con cierta torpeza que generó risas entre los presentes. El más aplaudido por su destreza con la bandeja fue el intendente de San Rafael, Omar Félix, quien incluso bromeó con postularse para un reality de gastronomía.

El gobernador Alfredo Cornejo encabezó el evento junto a la vicegobernadora Hebe Casado y el intendente de Godoy Cruz, Diego Costarelli. En su discurso, Cornejo hizo énfasis en la importancia de la Vendimia como símbolo identitario de la provincia y su impacto en la economía y el turismo.

“Mendoza y la Vendimia son una marca registrada en el país y el mundo. Esto no es solo folklore, es un motor económico y cultural que tenemos que seguir potenciando”, afirmó el mandatario.
No faltaron guiños políticos en su alocución, en la que también destacó la importancia de la inversión privada en el sector vitivinícola.

El ministro de Defensa de la Nación, Luis Petri, también se hizo presente en el desayuno, aunque su visita fue breve. Llegó, saludó a las reinas y a los empresarios, y antes de que terminara el evento, partió rumbo a Bahía Blanca debido a las contingencias climáticas que afectaban la zona.

Sin embargo, su paso no pasó desapercibido. En una de las mesas se escuchó a un empresario comentarle en tono jocoso: “Ministro, ya sabemos que en la Vendimia hay que estar, aunque sea un ratito, para la foto”, lo que generó risas y algún que otro comentario entre los asistentes.

Como es habitual, el Desayuno Real no solo es una celebración, sino también un espacio clave para el networking. Representantes del sector vitivinícola y empresarios de distintos rubros aprovecharon la ocasión para intercambiar ideas y fortalecer relaciones.

Un dato interesante es que este año se incorporó un espacio dedicado a emprendedores de la economía social, quienes fueron los responsables de confeccionar los elementos utilizados en el desayuno: tazas, bandejas y delantales, todos con diseños exclusivos que reflejan la identidad mendocina.

Otro hecho destacado del evento fue la presencia de las ministras de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza, Norma Llatser y Teresa Day, marcando un hito en la historia del tribunal, que por primera vez tiene dos mujeres en su composición.

Entre las asistentes, más de una reina departamental se acercó a saludarlas, comentando que son un ejemplo de liderazgo y representatividad.

Como cada año, el cierre del Desayuno Real estuvo marcado por un brindis colectivo, en el que todos levantaron sus copas de vino blanco espumante, símbolo de celebración y augurio de una gran Vendimia.

Y, por supuesto, no faltó la clásica foto grupal, en la que intendentes, reinas, empresarios y funcionarios posaron juntos, reafirmando la unión de los distintos sectores en torno a la fiesta más importante de Mendoza.

El Desayuno Real sigue consolidándose como un evento clave del calendario vendimial, un espacio donde la política, la tradición y la economía se entrelazan en un ritual que cada año deja nuevas anécdotas y momentos para el recuerdo.