Murió un motociclista de 28 años tras chocar contra un camión estacionado en Tunuyán

Un nuevo y trágico episodio vial volvió a sacudir a Tunuyán en la madrugada de este jueves. Un joven motociclista de 28 años perdió la vida luego de impactar de lleno contra el acoplado de un camión que estaba estacionado sobre calle Quintana, a pocos metros del cruce con Miguel Silva, en la zona de Colonia Las Rosas. A su lado viajaba una joven de 22 años que, tras el brutal choque, fue trasladada de urgencia al hospital y permanece internada.

La víctima fatal fue identificada como Daniel Mauricio Peñaloza. Conducía una moto Zanella 150 cc y, por motivos que aún se investigan, perdió el control del rodado y terminó incrustado contra el costado del camión, que estaba aparcado sin ocupantes en el margen de la calle. El estruendo alertó a los vecinos, que rápidamente llamaron al 911. Minutos más tarde, una ambulancia llegó al lugar, pero los médicos no pudieron hacer nada: Peñaloza ya estaba sin vida.

Su acompañante, una joven que aún no fue identificada públicamente, fue derivada en estado delicado al hospital local, donde quedó internada bajo observación. Su pronóstico es reservado.

La escena quedó cargada de dolor y conmoción. Familiares del joven se acercaron hasta el lugar del accidente, aún incrédulos ante la noticia. También lo hicieron peritos de la Policía Científica, que trabajaron durante varias horas tratando de reconstruir la dinámica del impacto y determinar si el camión estaba correctamente estacionado y señalizado.

Este hecho vuelve a encender las alarmas sobre la seguridad vial en el Valle de Uco. No es el primer accidente fatal con características similares que ocurre en la zona. En diciembre pasado, un motociclista de 21 años murió tras colisionar contra otro camión estacionado en Vista Flores, también en Tunuyán. Y apenas en febrero, un choque entre una moto y una camioneta dejó a dos personas hospitalizadas, una de ellas en terapia intensiva.

Las autoridades locales insisten en la necesidad de reforzar los controles, pero también en la responsabilidad individual: usar casco, circular a velocidad moderada y prestar máxima atención, especialmente durante la noche, cuando la visibilidad es reducida y muchas calles no están debidamente iluminadas.

Hoy, una familia entera llora la pérdida de un hijo, un amigo, un ser querido. Y otra joven pelea por su vida en una sala de hospital. Una vez más, el dolor llegó sobre dos ruedas.