Testigos clave aseguran que la operación a Maradona fue innecesaria y agravan la situación de Luque

    Cuatro médicos que participaron en la detección del hematoma subdural de Diego Maradona declararon en el juicio por su muerte y coincidieron en que no era necesario operarlo. Sus testimonios comprometen aún más al neurocirujano Leopoldo Luque, uno de los principales imputados en la causa.

    Nacionales10/04/2025 Expreso Mendoza

    En una jornada cargada de tensión y emociones en los tribunales de San Isidro, cuatro testigos clave declararon este jueves en el juicio por la muerte de Diego Armando Maradona y complicaron aún más la situación del neurocirujano Leopoldo Luque. Los médicos que descubrieron el hematoma subdural que aquejaba al Diez fueron contundentes: coincidieron en que, en su momento, no era necesario operarlo.

    Las declaraciones generaron un fuerte impacto en la sala, donde se juzga a Luque y a otros siete profesionales de la salud por el presunto “homicidio simple con dolo eventual” del astro. Según trascendió, los testigos aseguraron que tanto en la clínica Ipensa de La Plata como en la Clínica Olivos —donde finalmente se llevó a cabo la intervención quirúrgica— se discutió internamente la conveniencia de operar, y en ambos casos, el consenso entre los médicos fue que no era urgente ni imprescindible.

    Mario Baudry, abogado de Dieguito Fernando, hijo menor de Maradona, detalló ante los medios que “en Ipensa no estaban de acuerdo en operarlo y por eso lo traen a Olivos. En Olivos tampoco lo querían operar los médicos de la clínica. Termina interviniendo otra gente, no el plantel estable de profesionales". Esa “otra gente” es precisamente el equipo encabezado por Luque.

    Una de las declaraciones más reveladoras fue la de Rodolfo Benvenutti, médico cirujano y jefe de quirófano del Hospital La Merced, quien estuvo presente durante parte del proceso. Benvenutti describió a Luque como un hombre “emocionalmente afectado, más parecido a un fanático o a un familiar angustiado que a un profesional médico con la objetividad necesaria para tomar decisiones quirúrgicas”. Sus palabras cayeron como una bomba en la sala, donde algunos de los presentes no pudieron ocultar su incomodidad.

    El hematoma subdural fue detectado a fines de octubre de 2020, semanas antes de la muerte de Maradona, y fue el motivo por el cual se lo intervino quirúrgicamente en la cabeza. Sin embargo, la atención posterior a la operación y las condiciones en que fue dado de alta siguen siendo eje de una polémica judicial y mediática que no da tregua. Según la acusación, Diego murió solo, sin la atención adecuada, en una casa alquilada en Tigre que no estaba preparada como clínica domiciliaria.

    Las palabras de los testigos suman peso a la teoría de la fiscalía, que sostiene que hubo un “abandono de persona” por parte del equipo médico, y refuerzan la idea de que la cirugía pudo haber sido innecesaria, con lo cual se habrían precipitado una serie de decisiones médicas desacertadas.

    El juicio continúa, y cada audiencia abre nuevas grietas en el relato de los profesionales imputados. Mientras tanto, la figura de Diego sigue generando pasiones, incluso en el ámbito más frío y riguroso de la justicia. Como si su historia, incluso después de muerto, no pudiera escapar al dramatismo que lo acompañó toda la vida.

    Te puede interesar
    Lo más visto