La inseguridad crece en Guaymallén y Maipú con nuevos asaltos que alarman a los vecinos

    Dos violentos robos ocurridos en menos de 12 horas volvieron a encender las alarmas en Guaymallén y Maipú. Vecinos exigen respuestas ante una escalada delictiva que parece no dar tregua y refuerza la sensación de vivir en constante riesgo.

    Provinciales14/06/2025 Expreso Mendoza
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    La inseguridad vuelve a sacudir al Gran Mendoza con nuevos hechos de violencia que generan alarma en los vecinos y exponen una problemática sin freno. En las últimas horas, dos asaltos a mano armada —uno en Guaymallén y otro en Maipú— renovaron el miedo cotidiano en las calles y pusieron nuevamente en jaque la capacidad de respuesta de las fuerzas de seguridad.

    El primero de los hechos ocurrió el viernes, cerca de las nueve de la noche, en una zona semirrural de Guaymallén. Un hombre de 56 años estacionaba su camioneta frente a su casa, sobre calle Mariani, cuando fue sorprendido por delincuentes armados que se habían ocultado en una finca vecina. Apenas bajó del vehículo para abrir el portón, los asaltantes salieron de entre las sombras, lo encañonaron y le robaron la camioneta —una Chevrolet Spin blanca— junto a su teléfono celular. Los ladrones escaparon de inmediato, sin que hasta ahora se tengan datos certeros sobre su paradero.

    Pocas horas después, en la madrugada del sábado, un nuevo episodio de violencia sacudió al departamento de Maipú. Un joven de 18 años caminaba por la intersección de las calles Río Diamante y Boedo cuando fue interceptado por tres sujetos que, también armados, lo amenazaron para robarle dos celulares y una billetera que contenía cien mil pesos en efectivo. La rapidez del asalto y la falta de testigos dificultaron la labor policial, que sigue sin pistas firmes.

    Ambos casos están siendo investigados por fiscales de turno y personal policial de las jurisdicciones correspondientes, aunque hasta el momento no se han registrado detenciones.

    La sucesión de hechos delictivos, que se suman a otros similares ocurridos en las últimas semanas, ha generado una creciente inquietud entre los habitantes de Guaymallén y Maipú. En redes sociales y grupos vecinales de WhatsApp, los reclamos por mayor patrullaje, mejor iluminación y cámaras de seguridad se repiten como un mantra desesperado. Algunos vecinos incluso comenzaron a organizarse para impulsar petitorios formales a las autoridades provinciales, buscando respuestas concretas que vayan más allá del operativo esporádico o del refuerzo temporario.

    Desde el Ministerio de Seguridad aseguran que se están intensificando los controles y operativos preventivos en zonas conflictivas, aunque reconocen que no siempre logran anticiparse a hechos de esta naturaleza. Mientras tanto, la sensación de desprotección gana terreno y deja al descubierto una realidad difícil de maquillar: vivir con miedo se ha vuelto parte de la rutina en muchos barrios del Gran Mendoza.

    La pregunta que flota, cada vez más fuerte, es si acaso hemos naturalizado esta forma de vivir, en la que un robo armado puede ocurrir en cualquier momento, en cualquier lugar, y sin consecuencias inmediatas para quienes lo cometen. La respuesta, por ahora, sigue sin aparecer.

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